El
hombre no puede vivir sin arrodillarse. Si rechaza a Dios, se arrodilla ante
un ídolo. No hay ateos sino idólatras. F. Dostoievski
El
peor momento del ateo es aquel en que se siente agradecido y no sabe a quién
dar gracias.
Gilbert Keith Chesterton
Todo el que teme la muerte,
es un ateo de corazón. Napoleón